Tarot - Herramienta de Crecimiento Personal


Elisabeth y el Tarot

Desde hace más de 21 años, Elisabeth ha venido estudiando apasionadamente la Kabalah, el Árbol de la Vida y el Tarot.  No se declara experta sino Facilitadora de Procesos de Transformación y sabe que el Tarot y el Árbol de la Vida son una forma maravillosa, más simple de lo que parece para lograr que todos podamos ser la mejor versión de nosotros mismos. 
Más que instrumento de adivinación, el Tarot como Herramienta de Crecimiento Personal nos habla de la carga energética del consultante.  Se trata de un intercambio respetuoso y el Tarot sirve como instrumento para traducir los mensajes que el ser superior y los maestros tienen para nuestro consultante.  Los Tarotistas y especialistas en diferentes técnicas energéticas somos simplemente traductores de la energía, canales para que nuestro cliente escuche a través de nosotros aquello que su inconsciente y sus guías tienen que decirle.

Tarot

La definición que mejor describe el efecto del Tarot es: El Tarot representa el puente de comunicación entre nuestro ser espiritual, nuestros guías y nuestra conciencia profunda. Se puede decir que cada carta del Tarot es un arquetipo como lo definió Jung, cada imagen despierta en nosotros recuerdos que están codificados en nuestro ADN; es por esto que nos impactan. Y que con esta herramienta, nos permitimos desarrollar la introspección, la clarividencia, y procesar las diferentes etapas de transformación de nuestra vida. 
Podemos:
Reconocer y estudiar el Tarot como Herramienta de Crecimiento Personal.
Utilizar los Arcanos como instrumento de meditación y visualización.
Reconocer los arquetipos en cada Arcano en nosotros y nuestro entorno. 
Para comprender qué es el Tarot, debemos irnos a la Kabalah y al Árbol de la Vida:

Kabalah

La palabra "Kabalah" viene de la palabra hebrea "lekabbel", que quiere decir recibir y con ese recibir la posibilidad de dar, como en los pueblos antiguos las verdades, las leyendas y las leyes eran impartidas de generación a generación, tanto así que la palabra Kabalah llegó a ser considerada como “La Ley”. 
La Kabalah es un método simple y preciso que investiga y define la posición del ser humano en el universo. La sabiduría de la Kabalah nos dice por qué existe el hombre, porqué nace, porqué vive, cuál es el propósito de su vida, de dónde viene y adónde va cuando completa su vida en este mundo.
Cuenta la leyenda que la Kabalah fue entregada a Moisés en el Monte Sinaí directamente de Dios en la forma de la famosa Zarza Ardiente, hace más de 3 mil años.  Otra versión nos dice que Dios entrega estas leyes a sus Ángeles, quienes formaron una escuela y la entregaron a su vez a los Humanos para que reconocieran el camino de regreso. 
Aún otra leyenda cuenta que Dios le entrega la Kabalah a su Arcángel Metatrón, quien a su vez se lo pasó a Noé, y éste a Abraham. Cuando Abraham sale de Egipto, parte de la información se queda allá y es desarrollada por los sabios de la región y es por eso que Egipto se convierte en uno de las grandes potencias de la antigüedad. Así 2000 años después, Moisés, que fue iniciado por los egipcios, completa su aprendizaje en el desierto. Se dice incluso que Moisés entrega estos conocimientos a los sabios y así, de generación en generación... hasta llegar a los reyes David y Salomón. 
Recordemos que el Maestro Jesús es descendiente de esos grandes reyes y según los estudiosos sus oraciones e invocaciones tienen una profunda connotación Kabalística. 
Los rastros más antiguos de estudio de la Kabalah que se han hallado datan del s. I, y su estudio se realizaba por medio de la contemplación de la Mercaba, de acuerdo con la imagen descrita por el Profeta Ezequiel.
El texto judío más antiguo sobre magia y cosmología, el Séfer Yetzirá (Libro de la Formación) apareció entre los siglos III y VI de nuestra era.  Se describe la creación por medio del Árbol de la Vida.  En él se explica la creación como un proceso en el que se involucran 10 números divinos (Sefirot) con las Cualidades Divinas del Creador y las 22 letras del alfabeto hebreo.  Sumados, se trata de los 32 senderos de sabiduría.  
El hombre aprende acerca de sí mismo, quién es y cómo es. Aprende lo que debe hacer ahora para lograr ser la mejor expresión de sí mismo, etapa por etapa, paso a paso. Enfoca la investigación de su ser hacia su  interior. Toda la experimentación se realiza sobre sí mismo, en sí mismo. A través del estudio de la Kabalah, producimos cambios internos, ocultos a los ojos de los demás, que sólo nosotros percibimos y conocemos. Es por eso que la Kabalah es conocida también como "La Sabiduría Oculta".
Cuenta la Kabalah que no se puede dar sin que exista alguien que reciba, que hay que ser igualmente cuidadoso con lo que se da como con lo que se recibe.  Somos contenedores de la creación de Dios.  Dios nos da la vida, nosotros la recibimos y luego nos volvemos cocreadores con El.
La meta del Kabalista es alcanzar todo aquello que el ser humano sea capaz, como ser pensante, la más elevada de todas las criaturas.  Por eso decimos que la Kabalah nos ayuda a recordar y escoger, momento a momento, Quienes Somos y Quienes Deseamos Ser.

El Árbol de la Vida

El Árbol de la Vida representa  el holograma de la creación y ese mundo infinito al que pertenecemos.  Nuestra mente racional necesita un esquema, delimitar, explicar de donde vinimos y hacia donde vamos.  Y muy armoniosamente, el Árbol de la Vida nos permite comprender, explorar ese mundo infinito que está dentro de nosotros, a la vez que despierta nuestra espiritualidad y nuestra creatividad.  El cerebro izquierdo está feliz de poder tener qué comprender a la vez que el cerebro derecho disfruta con todos los procesos de crecimiento espiritual que se activan con el estudio de la Kabalah y el Árbol de la Vida.
Formado por diez Sefirot, Esferas o Emanaciones de Dios y 22 Senderos que las unen, podemos imaginar como desde el vacío el Espíritu Divino comienza a manifestarse por etapas, adquiriendo cada vez mayor densidad. De la Nada se expandió de tal forma que necesitó desbordarse, así se forma cada una de las Sefirot, cada una llena de ese aspecto de Dios que se desarrolla, se expande hasta que es necesario que se desborde en otra de mayor densidad.  De esa forma, una a una, hasta llegar a Maljut, el Reino, que representa al hombre, al ser humano, la materia, la Tierra, que aun cuando es la más densa de todas las Sefirot, las contiene todas.  La misma sabia que se desprende en el primer Aliento Divino, se condensa paso a paso hasta llegar a esta realidad que conocemos. 
Cada Sefirá representa un aspecto de Dios, a la vez que un estado de conciencia en cada uno de nosotros.  Los Senderos conectan las Sefirot y representan los pasos que tomamos de una Sefirá a la otra.  Dicho de otra manera, es en los Senderos que sabemos en que fase de evolución estamos con respecto a cada uno de nuestros proyectos a cada momento. En ellos se encuentran los arquetipos, nuestras habilidades y potencialidades, que pueden o no estar ocultas para nosotros. 
Es muy importante que tomemos conciencia que cada uno de nosotros, cada ser, cada proyecto tiene su propio Árbol de la Vida.  Que nos desarrollamos a partir de allí.  Es una herramienta que utilizamos para crecer espiritualmente.  Cuando comenzamos a tocar cada uno de los aspectos, cada Sefirá, se inicia nuestro ascenso por el Árbol de la Vida, y por lo tanto nuestro crecimiento personal y espiritual.  Cada nivel contiene sus tesoros y dependerá de nosotros tener acceso a ellos.
Pasamos por cada Sendero, atravesamos cada Sefirá, reconociendo a ese Adam Qadmon, ese hombre primigenio de Dios que somos.  Así, al entrar en cada una de las diez Sefirot o Emanaciones, que representan las cualidades de Dios, recordamos que Yo Soy lo Que Soy, Ehieh Asher Ehieh.
Al andar por cada uno de los Senderos, abriendo en mi Espíritu la energía de cada Letra Hebrea, de cada Arcano del Tarot, cada Arquetipo, despierto en mí esa información que me recuerda que soy parte de Dios y El/Ella nos da la oportunidad de reconocernos como tal.  Y por lo tanto, aprovechamos cada uno de sus obsequios, nuestro libre albedrío para determinar cómo recorrer nuestro propio Árbol, nuestro mapa.  Dios nos permite cocrear con El/Ella nuestra realidad.
En el curso de Tarot - Herramienta de Crecimiento Personal estudiamos la relación que existe entre cada carta o Arcano del Tarot y el Árbol de la Vida.  Existe una relación entre cada Arcano del Tarot con las Emanaciones o Sefirot y los Senderos entre ellas.  Los números o Arcanos Menores están relacionados con las Esferas, los Arcanos Mayores con los Senderos.  Los 22 Arcanos Mayores representan los senderos subjetivos en medio de los 10 Senderos objetivos.

Tarot - Herramienta de Crecimiento Personal

Cursos y talleres

A través del estudio del Tarot como Herramienta de Crecimiento Personal nos conectamos con cada Sendero y cada Sefirá del Arbol de la Vida.
En este curso, Elisabeth no pretende enseñar al estudiante a "adivinar" sino a intuir y percibir a través de las imágenes del Tarot la conexión del Árbol de la Vida con la psique y con lo cotidiano.
Existen tres modalidades para estudiar el Tarot con Elisabeth:
Taller Intensivo: Tres días intensivos que se enfocan en permitirle al participante ser consciente de que sí tiene la intuición y las distinciones necesarias para interpretar las imágenes del Tarot.  El primer día lo dedicamos a explorar los Arcanos Mayores a través de nuestros procesos personales.  El segundo día a accesar la energía de los otros participantes, así como la energía de un tema más universal.  Finalmente, el último día lo dedicamos a estudiar los cuatro elementos, las familias del Tarot o figuras y los números como parte de un proceso de creación en cada elemento.
Curso de Formación: Dura cerca de ocho meses, dividido en 36 clases semanales de dos horas, en cada clase solo se estudia un Arcano y se realizan prácticas en vivo, de esa forma el participante nota que sí puede, que es mucho más intuitivo de lo que creía y que puede utilizar esa información en todos los campos de su vida.  
Por Internet: Con la misma estructura y duración que la formación en vivo, pero esta vez de forma más privada.  Cada estudiante lee el material y aplica una serie de recomendaciones y ejercicios que deberá reportar.  
Cada modalidad tiene su encanto:  en el caso del taller intensivo, se trata de una oportunidad sin igual de practicar el Tarot, aun cuando no sea a profundidad, si brinda una visión general del Tarot y de lo que se puede obtener.  En el caso del curso presencial de formación, los estudiantes crean un ambiente de confianza en el que es posible compartir experiencias y vivencias que enriquecen el conocimiento teórico.  Y en el caso del curso por internet, el participante lo lleva a cabo a su ritmo, a su tiempo, de forma reflexiva y personal.
Para más información:
elitepperk@gmail.com
+58 424 256 5855
+58 212 986 4254